Todavía no tienes una comprensión profunda de quién eres realmente. Sigues escribiendo a base de razonamientos... y no producen una sensación de autenticidad
Se suele atribuir a Frédeéric Bastiat, el liberal francés del siglo XIX, [la sentencia] "Si las mercancías no cruzan las fronteras, lo harán los soldados". La dependencia mutua hace disminuir los motivos de conflicto entre los estados
Creer en el capitalismo no es creer en el crecimiento, la economía y la efectividad. Por muy apetecibles que puedan ser, se trata sólo de resultados. En el fondo, creer en el capitalismo es creer en el ser humano
Algo ha cambiado en la esencia de nuestra experiencia cotidiana cuando puede sernos más conocida la imagen de Nelson Mandela que la cara de nuestro vecino de enfrente
Giddens, A., Un mundo desbocado. Los efectos de la globalización en nuestras vidas
La idea de la supremacía del capitalismo liberal debe matizarse asimismo con la constatación de que, probablemente, nunca antes en los países del mundo ha habido sectores públicos tan voluminosos ni una presión fiscal tan elevada como en nuestros días
Internet se anquilosaría si no enviáramos a diario mensajes
electrónicos, encargáramos libros o nos bajáramos música a través de esta red
informática de ámbito mundial. Ninguna empresa importaría artículos del
extranjero si no los solicitáramos y nadie invertiría dinero al otro lado de
sus fronteras si allí no hubiera empresarios dispuestos a invertir para
satisfacer la demanda de los clientes. La globalización la conforman nuestros
actos cotidianos. […] La globalización es un fenómeno que parte desde abajo,
por mucho que los políticos se apresuren a encuadrase bajo todo tipo de siglas
imaginables (UE, FMI, BM, ONU, UNCTAD, OCDE) a fin de
articularla
Muchos
se declaran impotentes ante la globalización, pero no es nada extraño sentirse
impotente ante las decisiones descentralizadas de millones de seres humanos. Si
otras personas tienen libertad para decidir sobre sus vidas, nosotros no
ejerceremos ese poder sobre ellos, pero a cambio podremos moldear nuestros
destinos como nunca habíamos tenido la oportunidad de hacerlo anteriormente.
Ese tipo de “impotencia” me parece positiva. Nadie lleva el timón de mando,
porque estamos todos dirigiendo el barco