viernes, 30 de junio de 2017

Publicar. Calidad y caridad

Se publica mucho. Se dice que hoy hay más escritores que lectores.
Eso ha de ser un fenómeno de masas. Y, si hemos de creer a Ortega, masas rebeldes e impías. De modo que sólo cabe esperar que, al menos, sean inteligentes y con sentido del humor.

Ahí lo dejo, en mi blog. Por si interesa:

«la obra de caridad más propia de nuestro tiempo: no publicar libros superfluos».


Ortega y Gasset, La rebelión de las masas.

miércoles, 28 de junio de 2017

Realidad, Belleza y misterio

Los pesimistas suelen autodenominarse “realistas” para transmitirnos sus desánimos y amargarnos el gozo de la belleza que late en cada poro de la realidad.
En La Eva futura se recuerda la maravilla. Y ahí, en mi blog, lo dejo. Por si interesa:


La réalité «est suffisamment surprenante pour qu'il soit fort inutile de l'entourer d'un autre mystère que le sien».

La realidad «es suficientemente sorprendente para que resulte totalmente inútil envolverla con otro misterio distinto del suyo propio».



Auguste Villiers de L'Isle-Adam, L'Eve Future

viernes, 23 de junio de 2017

Cosas de la moda y la modernidad

Lo moderno es lo que está de moda. Y ya sabemos lo que pasa con las modas. En primer lugar, que están amenazadas de muerte: pronto pasarán, caerán. Elevar lo moderno, la moda, a categoría obliga a innovar sin cesar. Pero, en segundo término, nadie ha dicho que lo que está de moda sea bueno y mejor que lo anterior.
O, dicho de otro modo, para los modernos vale lo nuevo porque es nuevo. Y ya que sea bueno o no, es otra categoría del espíritu, que diría aquel.
En La Eva futura se dice de otro modo, más enfocado en el sujeto que en el objeto. Y ahí, en mi blog, lo dejo. Por si interesa:


«Des esprits soi-disant modernes, c'est-à-dire tarés par le plus sceptique des égoïsmes»,

«Espíritus autodenominados modernos, es decir, tarados por el más escéptico de los egoísmos»

Auguste Villiers de L'Isle-Adam, L'Eve Future

jueves, 22 de junio de 2017

Realidad y paciencia

La gradualidad, el avanzar paso a paso, parece algo constitutivo de la realidad humana. Y paradójico, porque nos gustaría lograr instantáneamente el objeto de nuestras ilusiones y nuestras voliciones.
Quizá por eso, en La Eva futura queda escrito lo que dejo en mi blog. Por si interesa:

«il paraît que pour trouver l'Idéal, il faut d'abord passer par le royaume des taupes».

«parece que para hallar el ideal primero hay que pasar por el reino de los topos»


Auguste Villiers de L'Isle-Adam, L'Eve Future

miércoles, 21 de junio de 2017

Buena voluntad y eficacia

Nada hay tan difícil como una buena voluntad, si hemos de creer a Kant.
Pero vale la pena. Sobre todo si Malègue tiene razón, que también podría ser.

Ahí, en mi blog, lo dejo. Por si interesa:


« Dieu ne laisse pas sans secours nos bonnes volontés. Il enverrait plutôt un ange. »,


«Dios no deja de socorrer nuestras buenas voluntades. Antes enviaría a un ángel»,


Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

martes, 20 de junio de 2017

Dios, la alegría o la muerte

Hay quienes explican a Dios y, más aún, la religión como el grito de angustia del desesperado, como el último recurso de quien ya ha perdido hasta la esperanza.
Hay quien explica así que los pobres y oprimidos crean en Dios con mayor facilidad que los ricos.
Quienes así razonan concluyen que ese Dios y esa religión es un espejismo, un consuelo ilusorio y, en última instancia, el opio del pueblo.
Y al argumento no le falta razón, sin duda.
Pero hay otro Dios: el que no se deja usar como Deus ex machina, que no responde convocado por nuestras necesidades sino por su amor. Es el que se celebra en la dicha e ilumina la alegría haciéndola crecer hasta que impregna toda una vida (de los ricos o de los pobres, qué más da) y la llena de felicidad… Quien lo probó, lo sabe.
A este parece aludir Malègue en esta cita que dejo en mi blog. Por si interesa:

«Dios, más visible a través de la felicidad que a través de la muerte».
«Dieu, visible à travers le bonheur plus qu’à travers la Mort».


Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

lunes, 19 de junio de 2017

Felicidad y amor

Leo a Malègue una referencia de Goethe que no necesita comentario sino, quizá, reflexión. Y ahí la dejo. Por si interesa:

Glücklich allein Ist die Seele die liebt…
Sólo el alma que ama es feliz, Goethe


Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

domingo, 18 de junio de 2017

Honestidad, sabiduría y límites

Es frecuente que quien ha obtenido prestigio en su ámbito (el fútbol o la astrofísica, tanto da) use ese prestigio para pronunciarse en áreas en las que es tan (in)competente como cualquiera.
Si él no se da cuenta de que ha traspasado los límites del área de su competencia, entonces no es tan bueno en su materia. Si se da cuenta, entonces está mintiendo.
Y algo de esto, incluso más, le entiendo a Malègue. Ahí lo dejo, en mi blog, por si interesa:

«Tout instrument de connaissance s’arrête aux réalités de son ordre, ignore les ordres supérieurs».

«Todo instrumento de conocimiento se limita a las realidades de su orden, ignorando los órdenes superiores».

Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

sábado, 17 de junio de 2017

Decisión y acción

O del dicho al hecho porque aunque no falta gente admirable, de personalidad firme y rotunda, lo habitual es que la construcción de nuestra vida sea tarea de la paciencia. De decidir nuestra meta y poner un paso después del otro, de despistarnos (como los lotófagos, incluso) y volver a intentarlo una y otra vez.
Por eso, y pese a que es ilusionante, no siempre podemos seguir a Malègue. Pero ahí lo dejo. Por si interesa:

«Les véritables décisions n’ont pas besoin d’arcs-boutants».

«Las verdaderas decisiones no necesitan arbotantes».

Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

viernes, 16 de junio de 2017

Intransigencia

Fondo y forma están conectados en no pocas ocasiones.
Quizá por eso Malègue pinta a su personaje con los pensamientos que dejo en mi blog. Por si interesa:


«Il haïssait les intransigeances dont il avait eu quelques exemples. Elles protégeaient, habituellement, des pensées d’une qualité fort médiocre et des cœurs bas».

«Odiaba las intransigencias, de las que había tenido algunos ejemplos. Protegían, habitualmente, pensamientos de una calidad muy mediocre y corazones viles».



Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

jueves, 15 de junio de 2017

La influencia de los actos

No podemos saber con precisión cómo influyen nuestras acciones. Poco, seguramente.
Tan poco que, a algunos, no les vale la pena el esfuerzo por obrar correctamente. Y ahí se queda, una (¿pequeña?) posibilidad que no se realiza.
Aunque hay otros modos de enfocar la cuestión.

Quizá por eso Malègue dice lo que dejo en mi blog. Por si interesa:

 «Sans doute l’Esprit souffle où il veut, mais le son qu’il rend dépend du trou des flûtes».

«Indudablemente el Espíritu sopla donde quiere, pero el sonido que produce depende del agujero de las flautas»,

Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là 

miércoles, 14 de junio de 2017

Los motivos del ciego azar

La (buena) suerte, el azar, el destino. Nombres todos de una fuerza sin razón ni motivo que nos eleva y nos coloca en buena posición.
Los talismanes, horóscopos y rogativas que pretenden dominar y encauzar esa fuerza como si de un Deus ex machina se tratase quizá olvidan que la suerte no es tan azarosa e inmotivada como piensan. Y al no comprender las razones, la suerte les vuelve la espalda.

Si lo entiendo bien, algo de esto dice Malègue. Ahí, en mi blog, lo dejo. Por si interesa:

«La chance jouait pour lui, comme elle fait pour tous les forts et les biens préparés, ce en quoi elle joue dans les règles».

«La suerte jugaba a su favor, como hace con todos los fuertes y bien preparados; así es como la suerte juega según las reglas».


Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

martes, 13 de junio de 2017

Ante nuestra realidad

Los modernos quisieran vivir y pensar desde la exención de supuestos, desde la situación originaria, prístina y pura del buen salvaje. No han superado la dicotomía de Parménides entre el ser y la nada, ¿o era Sartre?
Pero todos somos hijos, tenemos tradiciones, presupuestos, estirpe, linaje y familia. No somos Adán: tenemos ombligo. Podemos asumir y pensar nuestros supuestos o negar nuestra realidad. 
Quizá por eso, Malègue dice lo que dice:

«Un intellectuel n’échappe pas plus qu’un autre à sa race, mais il l’explore mieux».

«Un intelectual no escapa a su linaje más que ningún otro, pero lo explora mejor»


Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

lunes, 12 de junio de 2017

Asombro y delirio

Creo recordar que era Tales quien sostenía que la vida valía la pena ser vivida por el placer del conocimiento…
Quien lo probó lo sabe. Y mira a quienes organizan los estudios actuales como lo que son: pobres pigmeos intelectuales con alma de esclavos. Ni nis: ni quieren ni pueden salir de la caverna.
Normal que Malegue diga lo que dice. Ahí lo dejo, por si interesa:

«Il est bien connu, et d’ailleurs fort naturel, que le premier contact avec les abstractions philosophiques suscite chez les mieux doués des adolescents une manière d’ivresse divine».

«Es de sobra sabido y, por otra parte, muy natural que el primer contacto con las abstracciones filosóficas suscite entre los adolescentes mejor dotados una especie de divina embriaguez».



Joseph Malègue, Augustin ou le Maître est là

domingo, 11 de junio de 2017

Riqueza e Interés

Las reglas que funcionan en un ámbito no siempre valen en otro. No faltan, por ejemplo, quienes pretenden que el mercado se regule por la generosidad y el buen rollete. O que la economía, o la política u otros ámbitos se regulen por la ética. Aparte de que las empresas son otra cosa, es que fuera del mercado hay vida. Mucha vida. Y cada esfera de acción tiene sus reglas.
Y ahí queda lo que dice Hazlitt sobre esto. Por si interesa:

«Los economistas clásicos, al refutar los errores de su tiempo, mostraron que la política del ahorro, orientada en interés del individuo, sirve al propio tiempo el de la comunidad. Indicaban que el ahorrador consciente, al preocuparse de su propio futuro, no perjudicaba, sino que ayudaba a la sociedad».


Hazlitt, La economía en una lección

sábado, 10 de junio de 2017

Origen de la riqueza

Cuando sube o baja el paro hay políticos que se ponen medallas o que critican la inoperancia de los otros.
Algunos piensan que la riqueza, el mercado, el trabajo y casi todo, cuanto menos intervengan los gobiernos, mejor se gobiernan con su propia lógica interna. Y mejor van.
Claro que ¿de qué vivirían los intervencionistas?
Sobre esto dejo una referencia de Hazlitt, por si interesa:

«Los salarios reales tienen su origen en la producción, no en los decretos y órdenes ministeriales».


Hazlitt, La economía en una lección

viernes, 9 de junio de 2017

Democracia y pluralidad

Abundan los entusiastas del pensamiento único (ignorando, en el mejor de los casos, que es sinónimo de ausencia de pensamiento), garante de concordia y buen rollete. El mismo buen rollismo que quieren inculcar mediante el adoctrinamiento en la escuela. Para que todos actúen igual, de acuerdo con las consignas de lo políticamente correcto.
Otros, liberales y demás disidentes, sostienen que una sociedad libre es necesariamente una sociedad plural, con una escuela que no adoctrina sino que instruye.
Y luego está lo que dice Alinsky. Que aquí lo dejo, por si interesa:

«El conflicto es el corazón mismo de una sociedad abierta y libre. Si uno deseara componer la banda sonora de la democracia, el tema dominante sería la armonía de la disonancia».


Alinsky, Tratado para radicales

jueves, 8 de junio de 2017

Juicio del adversario

Hay quienes actúan y (se) gobiernan pendientes de qué dicen los demás. Es un modo de dar poder sobre nosotros al adversario, de considerar que su juicio es mejor que el nuestro, que su valoración es más adecuada. Es, en definitiva, una de tantas maneras de escenificar que son unos perdedores.
La razón la da Alinsky, si lo entiendo bien:

«cualquier medio eficaz es automáticamente juzgado como inmoral por la oposición».


Alinsky, Tratado para radicales

martes, 6 de junio de 2017

Vida y proyecto

La vida es proyecto y proceso o no es humana. Y riesgo que, a veces, acaba mal. Si no, no sería riesgo de verdad, ni aventura auténtica, ni libertad. Porque no sería humana.
Algo de eso le entiendo a Alinski:

«La vida está delante de nosotros, y si no nos ponemos a prueba enfrentándonos a sus desafíos, acabaremos acurrucados en los valles de una existencia sin sueños cuyo único propósito es la preservación de una seguridad ilusoria. Esto último es lo que la inmensa mayoría de la gente elige, temiendo aventurarse en lo desconocido».

Alinsky, Tratado para radicales

lunes, 5 de junio de 2017

Tensión y felicidad

El ideal de la felicidad, de la vida plena y lograda remite a una tensión hacia la mejora, hacia adelante, hacia la plenitud alcanzable por la acción. Y eso parece ser la vida humana. Y por eso, la aspiración a una vida sin tensión, sin lucha, es más propia del manso animal doméstico en que se han convertido no pocos.
Por el contrario, Alinsky ve los retos de la existencia y la necesidad de asumirlos para seguir vivos:

«La vida está delante de nosotros, y si no nos ponemos a prueba enfrentándonos a sus desafíos, acabaremos acurrucados en los valles de una existencia sin sueños cuyo único propósito es la preservación de una seguridad ilusoria».


Alinsky, Tratado para radicales

sábado, 3 de junio de 2017

Vida y tensión

Todo en la vida toma partido por algo. Toda vida es guerrillera. No hay objetividad desapasionada.


Alinsky, Tratado para radicales

viernes, 2 de junio de 2017

Temple risueño

Aferraos a uno de los rasgos más preciosos de la juventud, la risa; no la perdáis, como parece que os ha pasado a algunos: la necesitáis.


Alinsky, Tratado para radicales

jueves, 1 de junio de 2017

Confianza en sí mismo

A veces hay enemigos externos en nuestras puertas; pero siempre hay uno dentro de ellas: la invisible y maligna inercia que presagia más destrucción de nuestras vidas y de nuestro futuro que cualquier misil nuclear. No hay tragedia más oscura y devastadora que la muerte de la fe de los hombres en sí mismos y en su poder para dirigir su futuro.

Alinsky, Tratado para radicales