Reflexiones sobre El Principito, prólogo 2023

 

La búsqueda de sí mismo se publicó por primera vez en 2002.

Cuando lo escribí era un joven profesor de filosofía. Intentaba poner a mis alumnos en contacto con las grandes obras de los grandes pensadores. Lo hacía dedicando parte de mis horas de clase a leer y comentar dichas obras. Me refiero a la Odisea de Homero, La república de Platón o la Ética a Nicómaco de Aristóteles, entre otras.

Hablo de alumnos de Enseñanza Secundaria; y eran capaces de leer esas obras. De leerlas, entenderlas, discutirlas. Había que animarlos, acompañarlos, orientarlos… que es lo que hemos hecho siempre los profesores.

Ese tipo de trabajo pone al profesor en una estupenda tensión, que lo aleja de la rutina. Por un lado, hay que saber y saber mucho porque en ese modo de enseñar los alumnos puede preguntar cualquier cosa; no valen sólo los apuntes que el profesor lleva preparados de casa, sino que tiene que tener la mente muy bien nutrida y organizada. Por otra parte, el contacto con el alumno es más directo y se detectan las variaciones de interés y capacidad.

Hubo un momento en que la mayoría ya no era capaz de leer a Platón, por ejemplo.

Yo no sabía entonces que la comprensión lectora de nuestros alumnos estaba siendo socavada por una serie de modas y modos de entender la enseñanza. No sabía que lo que Ortega llamó la “barbarie del especialismo”, la estrechez de miras, iba ganando terreno en el sistema educativo.

Lo intuía, lo veía en las aulas y luchaba para dotar a mis alumnos de lo que hoy llamaría una educación liberal, es decir, una formación que les permitiera apoyarse sobre los hombros de los gigantes que nos han precedido. Leer a Séneca o Shakespeare no significa ser “de letras” sino vivir y sentir el mundo como lo experimentaron los grandes. Y a eso tiende una formación humanística, excelente base para dedicarse a la docencia, el ejercicio del derecho, la medicina, la arquitectura o cualquier otro oficio humano.

Veo con agrado que se impulsa este enfoque, que se organizan seminarios al amparo de lo que se denomina la tradición de los “Grandes libros” de los que hablara John Erskine, Mortimer Adler, Harold Bloom en El canon occidental, Allam Bloom en El cierre de la mente moderna y, afortunadamente, tantos otros.

 

 

 

 

 

 

 

 

Agosto 2023

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