domingo, 29 de mayo de 2022

La familia de Bernarda Alba

 



La familia de Bernarda Alba

 

 

 

Manuel Ballester

 

 

Quizá no haya familias perfectas. La nuestra, en cualquier caso, no lo es. Por otro lado, la familia en la que hemos crecido (esa familia concreta, imperfecta) ha influido poderosamente en nuestro modo de entender el mundo o, lo que es lo mismo, ha condicionado que nuestra vida haya sido más o menos alegre y feliz.

La familia es, por tanto, asunto serio ¿hay algo más serio que lo que hace posible una vida alegre y feliz?

Federico García Lorca (1898-1936) escribió el mismo año de su muerte La casa de Bernarda Alba, obra que no llegó a ver en el teatro. Sería representada por primera vez en Argentina, por la compañía de Margarita Xirgu en 1940.

viernes, 27 de mayo de 2022

Dejar o tomar la vida

Bertolt Brecht hace decir al sargento que «la paz no es más que abandono [Schlamperei], sólo la guerra trae el orden. La humanidad degenera en la paz».

Pudiera ser que la fuerza que es la vida necesite cauce, horizonte, tensión y orden. Sin una tarea que la dote de unidad y sentido, es fácil que se vuelva superficial, anodina: normal caer en la dejadez.

Y tanto da que hablemos de las vidas individuales cuanto de las vidas individuales constituyendo sociedades.

Hasta ahí llega el sargento: «Frieden, das ist nur Schlamperei, erst der Krieg schafft Ordnung. Die Menschheit schiesst ins Kraut im Frieden», B. Brecht, Mutter Courage und ihre Kinder.

miércoles, 18 de mayo de 2022

Fantastes, cuando la belleza nos rodea

 




Fantastes, cuando la belleza nos rodea

 

 

 

Manuel Ballester

 

 

En los mejores momentos de nuestra vida nos ha parecido soñar, gozar de un delicioso regalo. Y ese sueño y ese regalo era lo substancial de nuestra existencia.

El último capítulo de Fantastes (1858, Phantastes: A Faerie Romance for Men and Women) se abre con una cita de Novalis: «Nuestra vida no es un sueño; debiera serlo, y quizás llegue a serlo; Unser Leben ist kein Traum, aber es soll und wird vielleicht einer werden». Los sueños y recuerdos son evocadores y hermosos pero nuestra vida no es un sueño o, al menos, no totalmente.

jueves, 12 de mayo de 2022

Educar sin saber cómo

 



Educar es una tarea tan fascinante como difícil.
Es fascinante, porque consiste en el intento de transmitir lo mejor que se ha aprendido sobre la vida y su sentido a la siguiente generación, a los hijos.
Es difícil porque hijos y padres ¿No son mundos diferentes? Lo bueno y mejor para unos, ¿lo será también para los otros?

En cierto sentido, padres e hijos parecen pertenecer a especies diferentes, como un gato y una gaviota. Por eso he abordado la cuestión siguiendo "Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar", de Luis Sepúlveda.

El resultado es un libro que, con el título Educar sin saber cómo, está disponible en amazon en 3 versiones: formato digital, tapa blanda y dura.

Espero que os guste y os resulte provechoso.

Ah, la foto de la portada es cortesía del Juan Antonio Pellicer


lunes, 9 de mayo de 2022

Pedro es Páramo

 




Pedro Páramo

 

 

 

Manuel Ballester

 

 

«Dios mío, ¡Qué solos se quedan los muertos!». La célebre rima de Bécquer resuena hondo. Porque tememos la soledad y nos sobrecoge la muerte.

La muerte significa que se nos ha acabado el tiempo. La soledad significa que ya nadie nos oye ni nos habla.

Así parecen ser las cosas realmente. Juan Rulfo (1917-1986) plantea otra realidad. Lo hace con una novela breve en la que hay muertos que nos hablan, y que hablan entre ellos porque no están solos; es más, siguen habitando en Comala, el pueblo en el que pasaron su tiempo vital y que ahora los retiene en una duración que no es la de los hombres en la tierra ni la de los santos en el cielo.